Una propuesta gastronómica que no podes dejar pasar en Buenos Aires.
Una noche en Calle Corrientes, tiene una lista de actividades que son inevitables: Ir al teatro, recorrer Peatonal Lavalle, meterse en cuanta librería encuentres, y partirse la boca con una cena descomunal. Y sobre este punto es que vamos a meternos en la columna de esta semana.
La variedad de propuestas gastronómicas en el micro centro es abundante, y con estilos varios. Desde las clásicas pizzas (gorditas y con mucha muzza), comida hindú, Sushi, hasta las casas de comidas rápidas al paso. Nuestro destino, en esta oportunidad es un resto bar escondido enlas profundidades de la calle Pellegrini. Cruzado al Obelisco, nos encontramos en el 469 con Keller Bier, El Sótano.
Escalera abajo, comienza la aventura de quedar bien “pipon”. Una decoración que nos mete en la noche porteña, luces bajas, efectos lumínicos que acompañan la música que oscila entre el trap, reguetón, y dependiendo de la noche, un poco de rock & roll. La barra te recibe con un colorido de bebidas y bartenders haciendo de las suyas. Te ubicas en una mesa o barra y de ahí en más es solo cuestión de aflojar el cinturón.
La carta abre en un abanico enorme de opciones para disfrutar en pareja o con amigos, o si queremos ser glotones, empacharse comiendo. Desde tablas muy bien servidas, hamburguesas, pizzetas o platos especiales al mejor estilo gourmet. Un trato cordial y ameno por parte de las chicas que te reciben, y con la mejor buena onda te van guiando y proponiendo diversas ideas para deleitar el paladar.
Una amplia carta de cervezas nacionales y artesanales acompaña el menú, mientras que los cocktails se llevan la atención para abrir la noche.
RECOMENDADOS PARA PARTIRSE LA BOCA
PICADAS: Las tablas tienen todo lo que uno puede pretender para una cena completa. Bastones de Muzza, snack de milanesa, fritas, nachos, aritos de cebolla, pollo crispy y empanadas. Son algunas de las variantes que encontrás en las distintas opciones de “Picadas” (Para 2 y 4). Es bueno aclarar que en cualquiera de ellas, donde comen 2, tranquilamente comen 3.
HAMBURGUESAS: Las hamburguesas son platos para que la lucha se haga entre varios. Ternera rebozada, muzza, roquefort y huevo. Acompañada de guarnición. Algo similar pasa con la Milanesa Keller. Una bomba de carne que no se puede pasar por alto en el micro centro. Ternera, muzza, cebolla acaramelizada y salsa barbacoa.
PIZZAS: Las pizzas tienen ese toque porteño que no se encuentra en cualquier punto del mundo. Clásica, Napolitana, rúcula y parmesano, jamón y morrones. Siendo la versión Keller la estrella en este rubro: Salsa, muzza, salsa de bondiola braseada con miel, azúcar negra y cerveza.
En resumidas cuentas, una noche de teatro se debe terminar en Pellegrini 469, cruzadito al obelisco. Ahí Keller Bier te espera para disfrutar de forma distendida y celebrar las vacaciones, o lo que tengamos ganas de celebrar.
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