Sigue la novela de Borges: se presentaron herederos de Kodama, cuyo testamento no aparece
Los sobrinos de la viuda de Jorge Luis Borges se presentaron ante la Justicia como herederos del legado del escritor argentino.
Los sobrinos de la recientemente fallecida María Kodama, viuda y principal difusora de la obra de Jorge Luis Borges, se presentaron este martes a la Justicia como herederos en el expediente sucesorio iniciado por sus abogados para determinar la sucesión de los derechos de la creación del principal autor argentino.
“Me alegra mucho y alivia mi espíritu que los sobrinos de María Kodama se hayan presentado como herederos en el expediente sucesorio. Se abre una nueva etapa en la protección de la Obra de Borges”, tuiteó este martes Fernando Soto, abogado de la viuda de Borges, fallecida el 26 de marzo pasado a los 86 años.
Soto inició este lunes en la Justicia la “sucesión por herencia vacante” de Kodama, donde solicitó abrir el juicio sucesorio de la escritora y traductora para verificar la existencia de eventuales herederos porque había dado “por sentado” que Kodama “no hizo testamento”.
Según contó Soto a EFE este martes, “María [Kodama] esperó hasta último momento para hacer el testamento y cuando se dispuso a hacerlo no le dieron los medios la gente que estaba al lado de ella para concretar el acto de última voluntad” y cuando quisieron reaccionar, “ya era tarde”, porque “no estaba en condiciones de poder hacer un testamento”.
El abogado recalcó que “no hay nada oculto” y “no hay una intención, como una jugada recóndita”, sino que Kodama “esperó hasta el final” y “luego ya no pudo hacer el testamento”, “fue tarde”.
Según dijo Soto, “cuando [Kodama] manifestó su idea y dio algunas pautas para hacer el testamento, en ese mismo acto, en ese mismo día, debió haberse hecho”.
El abogado no cree que haya más herederos que los sobrinos de Kodama.
El letrado también había pedido en el escrito que se ordene “la realización de un inventario provisorio” para la “urgente protección y conservación del acervo sucesorio”, que quede a cargo de la escribana de confianza de Kodama, María Eugenia Vidaurre, quien resguarda los títulos de propiedad inmueble.
Vidaurre fue quien le había informado a Soto que no tenía ningún testamento.
Kodama era propietaria de bienes muebles, inmuebles y heredera universal de Borges.
Como tal, la viuda de Borges era la titular de los derechos de autor de toda la obra literaria, además de ser la propietaria de todas las medallas, condecoraciones y distinciones recibidas por el escritor argentino, de manuscritos originales, de dibujos de su autoría y de su biblioteca personal (intervenida por el propio Borges), entre otros muchos bienes de altísimo valor cultural, histórico y patrimonial.
La obra literaria de Borges se encuentra inscripta bajo la titularidad de Kodama en el Registro Nacional de la Propiedad Intelectual de la Dirección Nacional del Derecho de Autor.
Soto efectuó esta presentación en carácter de acreedor de Kodama, por tener interés en la conservación y resguardo del patrimonio de la viuda de Borges por haber sido su abogado personal y su apoderado judicial desde 2001 y por integrar la Comisión Directiva de la Fundación Internacional Jorge Luis Borges.
Kodama, que nació en Buenos Aires en 1937, conoció a Borges (1899-1986) cuando tenía 16 años y él 54, al chocar con él en la calle, a la salida de una librería. Ella le contó que iba a estudiar Literatura y él la invitó a estudiar juntos inglés antiguo, momento desde el que no volvieron a separarse.
Pese a que, en 1967, Borges se casó con otra mujer, Elsa Astete, Kodama siguió viendo al escritor argentino y finalmente se unieron en matrimonio en 1986, meses antes del fallecimiento, a causa de un cáncer hepático, del escritor en Ginebra.
Dos años después de la muerte del creador de El Aleph, en 1988, Kodama creó en Buenos Aires la Fundación Internacional Jorge Luis Borges, cuya sede alberga innumerables objetos personales, y cuyo vicepresidente, Fernando Flores Maio indicó este martes a EFE que “no tiene nada que informar por ahora”.